El río Urubamba corre alrededor de 1000 Km. del Cusco, a su unión eventual con el río Tambo en Atalaya. La descripción de este viaje es que le ofrecemos, realmente es un circuito que se une con los circuitos alrededor de Cusco, en la ruta de la zona de Atalaya en la sierra central. Si usted piensa seguir esta ruta se debe tener total protección contra la malaria: más aquí.
Los cursos de los ríos descienden de los Andes hacia un área de bosques de tierra baja, en dónde se entrecruzan diversos ríos grandes. Ésta, alguna vez, fue un área de bosque denso primitivo y matorrales. Todavía existen algunas poblaciones en la selva, con diversas etnias de pobladores nativos del Perú. Sin embargo, los impactos colectivos se notan, principalmente alrededor de Sepahua, las plantas y las líneas de trasporte de gas de Camisea han traído mucha influencia del mundo externo, la misma que ha sido mal recibida. Esto se ve mejor como una parte de un circuito, en lugar de como un destino.
Por favor note que ésta es una ruta difícil y unidireccional entre diciembre a marzo. Es imposible surcar el río a través del Pongo de Mainique hacia Quillabamba, y difícilmente podrá encontrar transporte terrestre aun cuando usted llegue.
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Quillabamba puede llegarse desde el Cusco por el camino y por tren. El mismo servicio ferroviario que se detiene en Aguas Calientes para llegar e ingresar a Machu Picchu desde allí, se sigue a Quillabamba, durante la ruta va atravesando el paisaje dramático del valle cuando desciende. El pueblo también puede alcanzarse por el camino de Santa Teresa (simplemente río abajo de Machu Picchu, pero no directamente conectado al Cusco por el camino), o desde el Cusco, por caminos que siguen la Cordillera Urubamba y más adelante se encuentran Santa Teresa y Quillabamba. Una variedad de autobuses públicos y camiones recorren estos caminos.
Hay amplios puntos de acceso para los paseos locales. En las colinas se esparcen ruinas Incas discretas, así como ruinas pre-Incas. En Rosaspatas se encuentran buenas ruina Inca cerca del pueblo de Huancacallo en la provincia de La Convención. El lado Norte de las montañas de Urubamba es mucho más seco que la cara sur y aquéllos que esperan una repetición de los precipicios vestidos de bosques verdes alrededor de Machu Picchu se desilusionaran. El panorama del camino hacia abajo es de precipicios al principio, luego sigue el río Urubamba hacia Quillabamba, en dónde el valle se ensancha.
Un camino malo de tierra llevan, río abajo, a los pueblos pequeños y empobrecidos de Kiteni y Tintinienkato. Donde el valle se cierra comienza la lluvia, acompañada de un importante y sumamente evidente incremento de la flora, la vida animal y los insectos, típicos de la selva. Viajar en esta región tiene sus riesgos, la mayoría manejables con precauciones. Primero, la salud: una vez más lo instamos a que si usted sigue esta ruta, deberá tomar precauciones muy serias contra la malaria, y debe estar consciente de los riesgos de la mosca de la arena (sandfly) que le trasmite la Leishmaniasis. Segunda, la seguridad personal: esta área, como es común en la ceja de selva de la región Cusco, se usaba y todavía se utiliza para la producción de la coca. Algunas plantaciones están autorizadas y algunos operan afuera de la ley. El transporte de los narcóticos es un problema mayor en la región, por lo que las fuerzas armadas y policía está activas en inspecciones y vehículos.
Tintinienkato es un poblado construido de madera. No ofrece ningún servicio significativo al viajero. Es, sin embargo, el fin del camino y es necesario tomar el río si usted desea ir más allá. Esta ruta lo lleva al Pongo de Mainique.
El nombre significa el "barranco de los osos", refiriéndose a los osos anteojos que se encuentra en el bosque circundante. El Urubamba penetra por las colinas a través de cuatro largos kilómetro por el cañón, los que se mueven por una garganta con un ancho de alrededor de 50 a 75m y rodeado por una pared vertical de 1000m, con helechos y orquídeas vistiendo las piedras. El río es relativamente tranquilo en la estación seca, pero sumamente exigente para todos en el período húmedo (diciembre a marzo), ofreciendo rápidos de Clase II. En esta estación solamente una tripulación de los remeros locales o los especialistas de aguas rápidas pueden intentarlo.
Es una lastima que en el Pongo falten lugares en donde observar el panorama, hay mucho ver. La convección del aire caliente de la mañana atrae a la nubes de la selva baja, y ellas dejan lluvias que produce un tapiz de plantas extraordinarias sobre los muros verticales. La pequeña cantidad de investigaciones taxonomistas que se han realizado en esta área, sugiere que éste es un lugar de extremo, o quizás único, de biodiversidad. Se encuentran mariposas y orquídeas, las que está sujetas a un grado extremo de endemismo. Tenemos conocimiento que sólo a una cantidad pequeña del difícil terreno se ha accedido y hay mucho más por aprender y recorrer. Los guacamayos, loros y otras aves abundan, incluyendo especies muy apreciadas como el quetzal dorado y el gallito de las rocas. Los guacamayos militares anidan en grandes números en los agujeros en el precipicio de enfrente, fácilmente vistos desde el río. Uno puede descubrir diversas especies de monos que se desplazan por el lugar.
La Cascada de Tonkini cae directamente desde la parte alta del río principal hacia su punto de caída varios cientos de metros por la cara del precipicio. Este atractivo impresionante esconde los rápidos de Tonkini, en el río principal que es el mayor desafío para cualquier barco que pasa hacia abajo del Pongo. Las personas locales Machiguengas piensan que este rápido es como el punto de entrada en la próxima vida, en dónde las almas finas se irán al cielo y aquéllos con un mal pasado irán a una zona oscura para sufrir.
El río surge abruptamente hacia tierra abierta, cubierta con un bosque amplio. El área, a la salida del Pongo, de 89,000 kilómetros cuadrados se ha establecido ahora como el Santuario Nacional Machiguenga Megantoni. (Megantoni significa el lugar del meganto, el nombre para los guacamayos.) Unas 800 personas viven aquí y toman un papel muy activo en su dirección y representación política. El clima notable, la superficie muy irregular de la tierra y el aislamiento, han hecho que esta área tenga una gran biodiversidad. Quizás porque han estado sujetos a muchos más estudios que todas las otras áreas de la ceja de selva, sin embargo se estima que existen más especies de plantas en esta área que en cualquier otra parte del mundo de una misma área. La bruma matinal y la llovizna en las mañanas crean un microclima el que las especies normalmente encontradas más arriba se mezclan con las de la selva baja, produciendo una gran riqueza de biodiversidad.
El centro también incluye una casa de selva, en la que pueden organizarse viajes locales. El Pongo de Mainique puede accederse en parte a pie y por cualquiera de sus numerosas grandes cascadas, donde los visitantes pueden ver orquídeas y otra fauna. El sendero principal de aproximadamente 50m sobre el río llega a su fin con una vista excelente del Pongo y las caídas de Tonkini. Personas más enérgicas pueden usar senderos menores o las huellas listas para llegar de alguna manera a los 1000m de precipicios que tiene la garganta. El centro también accede a por lo menos tres collpas, paredes de arcilla que las aves vienen a mordisquear. (Necesitan absorber la arcilla para contrarrestar las toxinas complejas que las plantas tropicales secretan para reducir la depredación).Es posible ver loros de ala verde, ala azul, ala azul y oro, ala escarlata y guacamayos militares en grandes números. Es una vista esplendida. Los guacamayos, en particular, entran en centenares a estas paredes de arcilla, mordisqueando la arcilla. Desafortunadamente, nuestra visita coincidió con diez días de lluvia intensa y no tenemos ninguna vista que valga la pena mostrar.
La vida Machiguenga es vivida siguiendo los modelos tradicionales. La telas se tejen a partir de productos del bosque, aunque la alpaca y la lana están empezando a aparecer como camisetas y calzoncillos para los hombres. Las casas se construyen de madera y paja. Las familias viven cazando, pescando y cuidando los huertos mixtos en los que ellos tienen la cosecha principal de mandioca (Manihot esculenta). Esta tiene que ser purgada de su cianuro natural, mojándola antes de ser hervida y cocinada. También es masticada por las mujeres y se escupe en vasos de fermentación, de los que se extrae una bebida espesa, la que se puede beber algunos días después. Esta se llama el obuiroki y se espera que los visitantes acepten la bebida cuando le dan la bienvenida, (No tomar esto es una ofensa contra la hospitalidad de todos en la mayoría de los pueblos, pero acá se han habituado a las maneras raras de los extranjeros y se puede negarse con educación).
La caza se lleva a cabo con muchos rituales, incluso se les ofrece a los perros de caza mezclas específicas de tejido seco de una parte de la presa con hierbas alucinógenas y estimulantes. Ellos tienden a tambalearse y dar vueltas durante algún tiempo en el aire después de tomar esto y aconsejan a los visitantes que guarden su distancia. Las flechas son hechas de cañas y plumas de aves con las cabezas talladas de varias maderas duras, dependiendo de la presa. Toma un día completo hacer una sola flecha, se trabaja normalmente acompañado y cantando sin parar.
Los chamanes son conocidos como los seripegari o usuarios de seri, el tabaco. Este no se fuma. Es molido con otros hierbas e introducido a la nariz por un hueso de la pierna del Curasoa, un ave grande. Las ceremonias de los chamanes son conocidas como el kamarampi y se hace uso de una gama amplia de alucinógenos del bosque. La mayoría se acompaña cantando, mientras van tamborileando y produciendo música del pegompi, un instrumento raro de cuerda tocado mientras lo sostienen con la boca. Las drogas incluyen a la bien-conocido Banisteriopsis caapi, llamado aquí como el kamarampi y en otra parte como la ayahuasca, y urubambashi, las especies de Psychotropia. Las dos sustancias se mezclan y la Psychotropia suelta el dimetilo de tryptamine, el agente activo en muchas plantas alucinógenas del nuevo mundo, pero la Banisteropsis inhibe las enzimas en el hígado humano que tiende a volverla inactiva. El Mamperikipini es una especie de Fitonia que también segrega el dimetilo de tryptamine y a veces se usa en lugar de Psychotropia. Una orquídea sumamente rara (Stelis especies) conocido como el kemishitsa se usa para consagrar al aprendiz de chaman, aparentemente los va llevando sobre alguna barrera indescriptible hacia alucinaciones libres. La Kosharishi (Codonanthopsis especies) se usa para bañar a los bebés, y es también un tranquilizante absorbido por la piel. Muchas otras plantas usadas para este propósito tienen propiedades similares.
Río abajo, el Urubamba adquiere un color castaño y se vuelve lento y barroso, 300m de ancho. Sus corrientes moviéndose entre bancos rojos, cubiertas con árboles de 15 a 25m. Hay un sinnúmero de lugares para detenerse y caminar en el bosque espectacular. Sin embargo, por favor debe tomar nota que es muy fácil perderse en un área que es recreada por la erosión del río en la estación de las lluvias, quedándose sin referencias. Las mariposas Morpho azules están por todas partes y los bancos atraen muchas otras especies para beber en el barro mojado. Los barros de arena son sitios para acampar tentadores pero por favor evite éstos, ya que las moscas de arena enjambran en la noche, las que llevan la enfermedad muy peligrosa arriba mencionada. Si su equipo debe dormir en estos lugares use repelente, protéjase con camisas de manga larga, pantalones largos y sobre todo, duerma bajo un mosquitero.
Por favor note, también, que hay infinidad de afluentes pequeños y grandes hacia el Urubamba. Los bien-preparados pueden explorarlos si tienen un bote del tamaño intermedio. Un parte importante de cualquier preparación de un viaje es la de contratar un guía competente y tener una entrevista con el para tomar conocimiento de la situación completa de seguridad con la policía local. Ni siquiera piense en organizar un viaje por su cuenta porque estos lugares salvajes no tienen esencialmente ninguna ley, más que la de los pobladores locales.
Camisea (250m) es el primer lugar importante río abajo. Está asentado en un depósito de gas verdaderamente enorme, primero explorado en los años setenta, luego por Shell en los años ochenta y actualmente esta siendo explotado por un consorcio de empresas variadas. Como empleado de Shell visité el área en 1980, cuando el pueblo era poco más que un grupo de chozas de madera al lado del río, sin el beneficio de un malecón. Desde entonces, ha crecido mucho, después de que han sido gastados US$ 2bn en el proyecto para llevar el gas a la costa, para usarlo en la ciudad de Lima y otro ramal para su exportación. Este gaseoducto atraviesa un área de pluralismo social excepcional, ya que por cada lugar que pasa cada comunidad recibe un paquete de compensaciones. Luego pasa sobre dos cordilleras (una de ellas un santuario natural), a través de lo que fue uno de los centros principales de la actividad del movimiento terrorista Sendero Luminoso, adicionalmente estas áreas son sísmicamente activas. Un ramal del gaseoducto termina en el mar, en la reserva natural excepcionalmente frágil de Paracas, el otro va hasta Lima abasteciendo domicilios y plantas industriales. Las sensibilidades alrededor del proyecto son tales que sólo han terminado con la participación activa del gobierno Peruano y contra el activismo extremo organizado por las ONGs.
La exploración de las reservas de los hidrocarburos tiene una historia infeliz. En general en esa época fueron capaces de conseguir la cooperación activa de las personas locales y como una consecuencia, se tuvo que traer muchos miles de montañeses desde el Cusco para trabajar en la cartografía sísmica de la región. Por lo menos varios miles de estos trabajadores fueron infectados con la verruga, la Leichmaniasis arriba mencionada y el Gobernador del Cusco fue sitiado en su oficina por las protestas resultantes. Una década después Shell perdió a varios operadores de la línea con los ataques de francotiradores de las huestes locales y se detuvo el desarrollo futuro por estas y otras muchas dificultades.
Camisea ha cambiado mucho, asì como las vidas de los Nahua, Kugapakori y Machiguengas, quienes viven en los alrededores. El consorcio actual ha sido activamente sobrellevado por las fuerzas armadas del Perú y aunque todos los procedimientos se han observado indudablemente, la atmósfera no está del todo muy tranquila. Hay muchos medios en el pueblo, incluso una pista de aterrizaje y un mini distrito de zona roja, en donde pocos viajeros desearán quedarse. La seguridad es firme, con un enfoque en prevenir el transporte de narcóticos y se investigan todos los barcos y artículos de equipaje de los pasajeros.
Río abajo se presenta la prisión del Sepa, un punto en que pocos querrá quedarse. Alguna vez fue una colonia de leprosos. El objetivo de la prisión actual es aislar a los delincuentes peligrosos y también rehabilitarlos, entrenándolos para trabajar y vivir en la selva. En la práctica, era la Isla del Diablo en el Perú, pero sin un rastro de romance en él. Actualmente esta en desuso.
Sepahua (200m) es el próximo puerto de llegada. Una vez soñoliento, se ha vuelto recientemente un centro de actividades. Su producto principal es la madera del bosque, y puede verse grandes cantidades de madera dura flotando fuera río abajo, enviándola para procesarla en Atalaya o Pucallpa. Las estimaciones son alrededor de doscientas mil toneladas de madera que son derribadas cada año.
El propio pueblo corre atrás de un área de la pista al puerto. Las calles están tapizadas con el barro tropical rojo, el que se convierte en una pasta pegajosa durante las lluvias y se transforma en un sinfín de agujeros llenos de agua en el que se satura con el tráfico. La mayoría de las casas están hechas con madera cruda y tejados de paja. Yo vi más de un docena de arañas con los cuerpos del tamaño de huevos hervidos en la paja del lugar en dónde me quedé por una noche. Una hormiga local abundante, (especie de Paraponera) se llama la veinticuatro por el tiempo que su mordedura continúa hiriendo. Éstas crecen entre dos y tres centímetros de longitud y tenerlas de invitadas en un saco de dormir es muy doloroso. Las personas locales los llaman el muishi. Los insectos mal recibidos son algo característico del lugar, como lo es la malaria y otras como consecuencias de las pobres medidas de higiene.
La población del pueblo es en su mayoría mestiza principalmente costera, quienes ejecutan virtualmente todo el comercio, hoteles y tiendas. También existen los Machiguenga, Amawaskas, Piros y los Yoras, quienes tienen sus parcelas en los alrededor del pueblo, los que sirven como comerciante para aquéllos pobladores del bosque profundo que viene a cambiar manualidades y medicinas herbarias por artículos fabricados. Muchos trabajan ahora para compañías madereras; otros ofrecen servicios de curanderos de chamanes. Hay una presencia permanente del ejército y el tráfico del río está una vez más sujeto a control.
Sepahua esta a tres días de viaje por tierra desde Lima, vía Atalaya, Satipo, Oxapampa y sobre los Andes, por la Carretera Central. [Más aquí.] También se puede hacer el viaje por aire, alrededor de una hora, aunque los servicios no son regulares. Una tercera opción es continuar río abajo Pucallpa.
El bosque mengua y las aguas barrosas del río corren a lo largo de la ribera continuando río abajo hacia Atalaya. La selva se va adelgazando y el espacio aumenta entre la selva espinosa, y cuando el pueblo se aproxima también aumentan los poblados esparcidos. El ganado se ve en la orilla entre los matorrales del arbusto espinoso la Lantana, y los árboles de palma son comunes.
El grupo principal que vive alrededor de Atalaya son los Asháninkas, combinados con algunos Piros. El área del puerto consiste en una mezcla de barcos con personas cargando y descargando madera y más recientemente, los suministros para el campo de gas de Camisea. La atmósfera es lo que uno consigue cuando muchos camioneros se sientan en los trópicos a consumir cerveza. Yo me encontré una vez allí con Mick Jagger, a quien lo dejó abandonado su piloto, cuando filmaba la película Fitzcarraldo.
Hay una variedad de lugares para visitar alrededor de Atalaya. Pueden contratarse a personas locales como guías en Atalaya, aunque no hay un negocio de viajes establecido en el pueblo más allá del propio tráfico del río y algunas comunidades nativas en los alrededores; muy pocas personas hablan inglés. Un paseo corto de dos horas o 20 minutos por el agua lo llevará al Tigre de Piedra y a las rocas del Toro Encantado. En estos lugares se han tallado a un gato y a un toro, así como formas de manos desconocidas. La Quebrada Aerija es un barranco que entrega un arroyo de cristal y puede alcanzarse en tres horas desde Atalaya. Merece la pena, ofrece bonitos y paradisíacos paisajes. La Quebrada Sapani es otro arroyo que fluye en el Ucayali, en este caso a dos horas al Norte por barco u ocho horas de camino desde Atalaya. El camino lo lleva a través de varios pueblos Asháninkas. El propio arroyo es un lugar bonito con muchas piscinas caladas. Fuera de los ríos existe un paseo de ocho horas a través de tantos kilómetros de bosque tropical, por una zona que es rica en animales e insectos, lo traerá también la quebrada Canuja y los monolitos del Caracol. Como con todos los paseos más largos, usted necesitará acampar allí toda la noche.
Otro paseo más largo toma un día y medio hasta los alcances de la Cordillera Negra pequeña. Normalmente se sigue el río de Unini a su fuente en la Laguna Encantada, notando que esto requiere alrededor de ocho horas de camina dentro de los cerros en condiciones tropicales. La 'laguna encantada' esta en el bosque profundo, intercalada entre las caras de la piedra, en una área como toda la selva rebosado con aves, insectos y vida de plantas. Usted necesitará un guía experto y animales de carga si usted no quiere llevar todo su equipo en el sol tropical. En Unini hallara aguas termales alrededor de tres horas de Atalaya por barco. El pueblo de Buenos Aires, a dos horas de Atalaya por barco, ofrece una cueva grande llena de murciélagos grandes. Nunca se ha explorado, pero según los pobladores locales e informes recibidos, se sabe que una docena de metros en él no hay oxígeno.
Un vuelo en avioneta de quince minutos lo traerá al Gran Pajonal, un área de matorral abierto y arbustos espinosos. Aquí se localiza uno de los lugares de Asháninkas más remotos dónde alrededor de treinta a cuarenta comunidades viven de la misma manera que sus antepasados. La ropa, idioma y costumbres sociales están completamente intactos sin influencia del mundo externo. Si usted quiere satisfacer sus expectativas, como lo hemos discutido anteriormente, usted tendrá que vivir con la comunidad y no simplemente en el campamento en su carpa. Si desea realizar un viaje de un día es posible: depende del horario de la aeronave y las condiciones meteorológicas.
Los barcos de Atalaya recorren río abajo hacia Masisea y Pucallpa y más adelante hasta Iquitos. La información sobre Pucallpa está aquí. También es posible venir a Atalaya por barco desde Satipo, por la vía de Chanchamayo, saliendo de Tarma, por la Carretera Central desde Lima. Se muestran detalles de esto aquí.